La concepción de las viviendas se ha tratado como un único conjunto arquitectónico. El todo es más importante que las partes. El Plan Urbanístico plantea la necesidad de realizar viviendas unifamiliares en hilera. Nosotros hemos querido potenciar esta idea de conjunto, no de repetición individualizada de la misma vivienda, si no de proyectar un único edificio, en el que las viviendas gocen de absoluta independencia, pero que en su lenguaje arquitectónico, formen parte de un único proyecto, de un todo, que solo tiene sentido entendiéndose en su conjunto.
Las viviendas están proyectadas para disfrutar de un espacio libre, abierto y fluido, donde los espacios interiores y exteriores se suceden y permiten unas vistas largas a través del espacio privado. Las terrazas, el patio característico de la arquitectura mediterránea y el espacioso jardín, son elementos que forman parte de la vivienda, espacios habitables, en los que el aire y la luz adquieren un protagonismo mayor, pasan a formar parte de la vida cotidiana.